Hoy, en el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, nos unimos como comunidad educativa para reafirmar nuestro compromiso con el bienestar emocional de nuestros estudiantes. Desde tempranas horas, hemos activado las rutas de atención para aquellos jóvenes que presentan conductas suicidas, brindándoles el apoyo necesario a través de primeros auxilios psicológicos. Nos dedicamos a escuchar con empatía, a orientarnos de manera oportuna y, sobre todo, a desear que cada uno de ellos encuentre paz en su mundo interior.
El papel de nuestros docentes ha sido fundamental en esta labor. Agradecemos profundamente a aquellos maestros que, con gran sensibilidad y dedicación, van más allá de sus deberes académicos para ofrecer una mano amiga. Escuchar, comprender y acompañar son gestos que no solo marcan la diferencia, sino que también salvan vidas.
Hoy
Gracias a toda la comunidad educativa que, con su solidaridad y compromiso, nos ayuda a prevenir y combatir el sufrimiento silencioso de quienes más nos necesitan. Juntos, seguiremos salvando vidas.
